¿Pienso que o pienso en que?

Recién alguien preguntaba en Facebook cuál era la diferencia entre pensar que o pensar en que. Recordé que había dudado entre esas dos opciones alguna vez, mientras corregía. Tenía la impresión de que ya había escrito algo en este blog sobre eso, pero no lo encontré. Así que a continuación, resumo lo que dice el Diccionario de Dudas de la RAE.

1) Cuando significa 'opinar o creer algo’‘tener la intención de hacer algo’‘sacar una conclusión' o 'tomar una decisión', se construye sin la preposición en, ya que supone un objeto (es decir, es transitivo). En todos los casos, la estructura subyacente es "pensar (algo)". 
Pienso (que ella tiene poca paciencia). Pienso (empezar gimnasia mañana). Pienso (que lo mejor es ir caminando).

2) Cuando significa ‘evocar o recordar’‘tener en la mente algo o a alguien’‘dar vueltas a algo en la mente o reflexionar sobre algo', se construye con la preposición en. La estructura de la oración que conllevan estos sentidos es pensar en algo o alguien.

«Desde que murió, pienso en mi abuelo todos los días». «Estaba pensando en vos para el puesto de secretaria». «Pienso en la idea de tener hijos y me dan ganas de salir corriendo».

Así que ya saben, piénselo y después me cuentan. :)

¿Rotura o ruptura?

Mi amigo Sebastián me pregunta cuál es la diferencia entre estas dos palabras y cómo se usan.

El diccionario de la RAE las define de igual modo: ambas significan 'acción o efecto de romperse'. Para ruptura, agrega además el sentido 'rompimiento de relaciones entre las personas' y para rotura, 'raja o quiebra de un cuerpo sólido'.

En el uso, cada término suele emplearse en un contexto distinto, es decir que no son intercambiables. Mientras que rotura se utiliza para la acción de romperse algo físico o material (la rotura de un vidrio), ruptura se emplea en el caso de realidades inmateriales (la ruptura de las relaciones diplomáticas).

Muchos hablantes del español las usan en sus contextos respectivos correctamente, pero cuando tienen que explicar por qué han seleccionado una variante, no saben cuál es el motivo. Aquí, entonces, les dejo la explicación de por qué a veces prefieren una y no la otra.

¿Lejísimo o lejísimos?

El otro día me escuché diciendo que algo «quedaba lejísimos» y por un momento estuve confundida, ya que por su frecuencia de uso, sentía que la palabra era correcta, pero había algo gramatical en su conformación que no me cerraba.

Antes de buscar en el diccionario, supuse equivocadamente que la forma registrada debía de ser lejísimo, basada en una explicación que después me di cuenta de que no era del todo correcta. Expongo el recorrido que hice.

Para formar el superlativo de un adjetivo, se debe agregar a la raíz de la palabra en cuestión un sufijo que varía en género y número: -ísimo/ ísima / -ísimos/ -ísimas

La -s final, en este caso, aparecerá cuando se trate de un adjetivo que refiera a un sustantivo plural:

un ejercicio facilísimo/ ejercicios facilísimos

Inferí que por ser lejos un adverbio, la forma superlativa no podía contener -s final, ya que los adverbios no tienen ni plural ni singular, así como tampoco femenino y masculino (se dice «golpeó fuerte», pero no *golpearon fuertes). 

Busqué en el Diccionario panhispánico de dudas, y encontré que el término correcto es lejísimos, a pesar de que también se acepta lejísimo por cuestiones de uso. Investigué un poco y descubrí que en realidad, la palabra se forma incrustando el infijo ísim entre lej- y -os. 

lej + ísim + os

Fue en ese momento que me di cuenta de que si hubiera sido como yo creía, la forma resultante tendría que haber sido *lejosísimo, cosa que no ocurre, tampoco.

Dado que el procedimiento de creación es diferente, la -s final está bien y no indica plural, sino que es la misma -s de la forma original. De este modo, también se explica el caso de cerquísima, en el que la a no es la marca de femenino, sino la última letra del adverbio. 

cerqu + ísim + a


Fuentes:
http://morflog.hypotheses.org/
http://lema.rae.es/dpd/?key=lej%C3%ADsimo
http://forum.wordreference.com/showthread.php?t=591007

¿Crié o crie? ¿Guión o guion?

En algunas regiones hispánicas es común ver la palabra crié escrita con tilde: Me crié en Buenos Aires. Cualquier observador podría notar que hay una aparente contradicción: según la norma, el término es un monosílabo y como tal, no tendría que llevar el acento gráfico. La RAE, a través su Diccionario panhispánico de dudas, señala que no debe escribirse crié, sino crie, pero dado que existe un uso extendido de la variante con tilde, acepta como válida esta opción.

La explicación puede ser un poco larga y algo compleja, pero voy a intentar ser clara.

Según lo que todos aprendimos en la escuela, una vocal cerrada (i, e) y una abierta (a,e,o) forman parte de una misma sílaba siempre y cuando la cerrada no reciba la fuerza de la pronunciación. Se considera que hay diptongo, entonces, en la combinación ie. En las palabras cie-lo, pien-so, se-rie puede apreciarse claramente que los dos sonidos se pronuncian con un solo golpe de voz, es decir, en la misma sílaba (la palabra diptongo, de hecho, significa 'dos tonos'). Por el contrario, si esto último no sucede, entonces se produce lo que se conoce como hiato. En confíe, por ejemplo, la í forma parte de una sílaba y la e de otra: con- fí- e. 

De acuerdo con la regla, la palabra crie es monosílaba. La i y la e están juntas en la única sílaba existente. A pesar de que su escritura indica eso, la pronunciación puede sugerir otra cosa. Eso es lo que genera las dos opciones a la hora de tildar. En muchas zonas de Hispanoamérica, especialmente en México y en Centroamérica, los hablantes perciben que esta palabra se pronuncia con un solo golpe de voz, o sea como monosílaba (lo mismo que cien, para dar un ejemplo). Sin embargo, en otros países americanos como Argentina, Ecuador, Colombia y Venezuela, al igual que en España, los hablantes la pronuncian como bisílaba, modulando con énfasis tanto en la vocal cerrada como en la abierta: crI- É (se puede hacer el intento de golpear palmas en cada sílaba para advertirlo mejor). Es por esto que si el que escribe considera que tiene dos sílabas, le colocará una tilde, dado que estará frente a una forma aguda terminada en vocal.  Lo mismo ocurre con los pares guió o guio, guión o guion, huí o huí, fie o fié, entre otros (en el caso de guión, sería aguda finalizada en n). 

A pesar de esta descripción, la última edición de la Ortografía de la lengua española (2010) decide suprimir esta opción y con el fin de unificar los criterios ortográficos decreta que es obligatorio el uso sin tilde. Si bien es, a mi criterio, una medida razonable, por mi parte voy a obviar esta norma y a seguir escribiendo crié, huí, guió, guión y fié. Ustedes hagan lo que quieran.


Concordancia. A junto con B: ¿verbo en singular o plural?

Cuando se usan los nexos junto conademás de así como para unir elementos a un sujeto singular de una oración, surge la duda de si el verbo debe ir en singular o en plural.

1) «El director, junto con su asistente, llegó primero».
2) «El director, junto con su asistente, llegaron primero».

El Diccionario panhispánico de dudas explica que las dos opciones son válidas si todo el conjunto se antepone al verbo.

Es decir que el verbo puede aparecer en singular (opción recomendada por el DPD) y así el primer elemento es, estrictamente, el sujeto oracional:

«El director, junto con su asistente, llegó primero».

O en plural, y en ese caso los nexos funcionan como una conjunción copulativa que une núcleos de un sujeto plural:

«El director, junto con su asistente, llegaron primero».

Sin embargo, si todo el conjunto se pospone al verbo, o un elemento aparece delante y otro detrás, el verbo sólo podrá ir en singular:

«El director llegó primero, junto con su asistente».
«Junto con su asistente, llegó primero el director».


Consejo: no confundir junto a con junto con (ver entrada anterior)

¿Junto con o junto a?

Recuerden no usar junto a, con el significado de junto con. El primero significa ‘Al lado de o cerca de’, mientras que el segundo indica ‘En compañía de o con la colaboración de’:

Llegó al bar junto a junto con su mujer

¿Petiso o petizo?

¡Las dos a la final! Según el Diccionario panhispánico de dudas de la RAE, la voz procede del portugués petiz (‘niño’), y ambas grafías son válidas. Actualmente se prefiere la forma petiso, cuya pronunciación es la más cercana a la etimológica —la z portuguesa se pronuncia como una s sonora—, como la real motivada por el seseo.

No ¿aprietes? /¿apretes? /¿apretés? ese botón

Últimamente noto que cada vez está más generalizado el uso de la forma (vos) apretes, al menos en la oralidad. Todavía más frecuente es el fenómeno de la acentuación en la última sílaba, apretés, por contagio con la forma apretás, que es presente, también, pero del modo indicativo:

No apretes/apretés ese botón 

¿Les suena?

El mismo fenómeno ocurre con otros verbos que presentan la misma irregularidad; por ejemplo, sentarseNo te sentés ahí.

Lo que me interesa aquí, más que ubicarme en una postura normativa (aquella que diría: "esto está mal, ya que la norma dice otra cosa"), es intentar explicar brevemente por qué surgen estas variaciones. De hecho, es así como la lengua cambia. Cuando uno entiende por qué se producen estos fenómenos, ante un caso nuevo que presente el mismo patrón, ya sabrá cómo conjugar.

Aquí va la explicación.

Cuando los hablantes del español tenemos que conjugar el infinitivo apretar, lo que hacemos es buscar un verbo que sirve de modelo: en este caso, amar. La diferencia entre estas dos formas es que amar es un verbo regular (su estructura no cambia al conjugarse), mientras que apretar sí lo es: apret- se transforma en apriet- cuando se encuentra con determinadas desinencias. 
¿Qué ocurre entonces con la forma vos? En general, suele ser regular. Por ejemplo, para el infinitivo sentirse se dice él se siente, pero vos te sentís. Otro caso sería él se sintió, pero vos te sentiste.

¿Qué pasa con apretes/apretés (como en otros casos con la misma irregularidad)? A pesar de que las formas conjugadas para vos suelen ser regulares, en el presente del subjuntivo, vos es irregular: decimos vos apretás (indicativo), pero vos aprietes (subjuntivo). Un hablante nativo conjuga aplicando reglas; es por eso que se produce este error (no por no conocer la regla, sino por desconocer o simplemente olvidar la excepción). Es algo parecido a lo que sucede cuando los niños aprenden la lengua. Otro día me extiendo más sobre este punto.

Por alguna razón, la frecuencia de uso de algunas formas se extiende más que la de otras (yo registré usos de apretes pero no de penses, mientras que son igual de comunes las formas apretés y pensés).

Espero haber sido clara: si no entendieron, ¿apreten/aprieten? donde está el botón de los comentarios y me consultan. :)

¿Zaparrastroso o zarrapastroso?

Luego de una extensa licencia por maternidad, retomo las habituales preguntas existenciales del blog: ¿es zaparrastroso o zarrapastroso? A un hablante del español rioplatense, seguramente le sonará más la primera opción. Según el diccionario de la RAE, van las dos a la final. Incluso, zarrapastroso tiene un significado más amplio y aparentemente de esta se derivó zaparrastroso. Por lo que anduve leyendo en foros, en muchos países de América Latina está más extendida zarrapastroso. ¡Linda palabra para inventar un trabalenguas!

Casos especiales de concordancia II: Adjetivo luego de dos o más sustantivos de distinto género unidos por la conjunción o

Otro caso especial de concordancia que puede traer dudas es el ejemplo del adjetivo que está colocado luego de dos o más sustantivos de distinto género unidos por la conjunción o. Aquí deben distinguirse dos cuestiones:

a) «Un auto o una bicicleta usados».

En estas oraciones, o implica exclusión, alternativa o contraposición entre los sustantivos que une, por lo que lo más recomendable es que si los sustantivos son de distinto género, el adjetivo vaya en plural y en masculino para dejar claro que califica a todos ellos.

b) «La mordedura de serpiente o emponzoñamiento ofídico registrado».

Cuando la conjunción o denota identidad o equivalencia, es decir, une sustantivos que se refieren a una misma realidad y son de diferente género, el adjetivo ha de aparecer en singular y en masculino. Lo normal, en estos casos, es que el segundo sustantivo vaya sin determinante (*la mordedura o el emponzoñamiento)

Efectivos

Navegando en el sitio de la Fundeu BBVA, me topé con algo que  me sorprendió. La palabra efectivos se refiere al conjunto de los miembros de las patrullas o cuadrillas, pero no a cada individuo en particular, por lo que es correcto decir «los 100 policías» o «los 100 miembros del cuerpo de policía», pero no debería usarse como habitualmente lo emplean los medios de comunicación: *«Aseguran que habrá 100 efectivos más en Moreno». (Clarín)

¿Debe haber o deben haber?

En este caso, haber es parte de una perífrasis (es decir dos o más formas verbales que funcionan como una sola unidad de significado). La regla dice que siempre que haber signifique existencia, el plural será incorrecto incluso si se presenta en el componente verbal que forma la perífrasis.

Esto no solo ocurre cuando se combina con deber, también sucede cuando forma frase con poder, soler e ir.


Entonces, lo correcto será:

debe haber elecciones y no *deben haber elecciones
debería haber más personas como ella y no *deberían haber más personas como ella
puede haber problemas y no *pueden haber problemas
mañana va a haber varias manifestaciones y no *van a haber varias manifestaciones
suele haber inconvenientes y no *suelen haber inconvenientes

Colores: género y número (círculos rojos/ pantalones violeta)

¿Alguna vez se preguntaron por qué a veces se dice «círculos rojos», concordando sustantivo y adjetivo en  género número, y en otros casos es perfectamente aceptable una expresión como «pantalones violeta», en la que no parece haber concordancia alguna?

Suele ser una duda que tienen los alumnos extranjeros. La RAE lo explica en su Diccionario Panhispánico de Dudas. Aquí resumo los puntos más importantes.

1) Cuando los nombres de colores modifican a un sustantivo (o sea, funcionan como adjetivos) y son palabras de dos terminaciones (blanco/a, negro/a, rojo/a, amarillo/a, etc.), se usa la forma masculina o la femenina según sea el género del sustantivo al que modifican: falda roja, pantalón negro


En estos casos, hay que distinguir entre los nombres que designan únicamente colores, los cuales concuerdan siempre con el sustantivo al que modifican (faldas rojas, pantalones verdes, ojos azules, etc.), y los nombres que designan primariamente una flor, un fruto, una sustancia o un objeto que tienen ese color característico, los cuales pueden funcionar como sustantivos, por lo que permanecen invariables en plural (ojos malva, faldas naranja, camisas añil, etc.) o como adjetivos, por lo que deben concordar con el sustantivo,  (ojos malvas, faldas naranjas, camisas añiles, etc.). 


2) Si, para designar matices, el nombre de color se halla a su vez modificado por otro (verde esmeralda), o por un adjetivo como claro, oscuro o similares, lo normal, de acuerdo con el uso mayoritario, es usar ambos términos en masculino, incluso en referencia a un sustantivo femenino: una camisa rojo oscuro. Esto es así porque se supone que el sustantivo masculino color está implícito en la oración. En estos casos, además, lo normal es mantener ambos elementos invariables en singular, de acuerdo con el uso mayoritario (pantalones verde botella, ojos azul claro, etc.).
A pesar de esto, también es posible (pero menos aceptada) la concordancia en femenino: «La tierra era marrón clara». 


3) Si, para designar matices, el nombre de color se usa antes de otro sustantivo, este último permanece invariable: «los verdes botella», «los grises perla», etc.

¿Inglaterra, Reino Unido o Gran Bretaña?

Copio el artículo que hoy publica la Fundación para el Español Urgente:

«No deben usarse como sinónimos Inglaterra, Reino Unido y Gran Bretaña, pues los tres nombres responden a realidades geográficas diferentes.

En las informaciones relacionadas con los disturbios de Londres, se utiliza a veces indiscriminadamente Inglaterra, Reino Unido y Gran Bretaña cuando el nombre oficial de ese país es Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, aunque lo habitual es utilizar su forma corta: Reino Unido.

Gran Bretaña no es sinónimo de Reino Unido. Gran Bretaña está formada por Inglaterra, Escocia y el País de Gales; mientras que Reino Unido incluye Gran Bretaña e Irlanda del Norte.

En lo que respecta al gentilicio, si bien lo habitual es hablar de inglés, resulta más adecuado el término británico».

Tomado de http://www.fundeu.es/recomendaciones-I-inglaterra-reino-unido-y-gran-bretana-no-son-lo-mismo-1042.html

¿Veintiuno por ciento o veintiún por ciento?

Copio el artículo que publica hoy la Fundación del Español Urgente porque lo explica muy claramente.


Las expresiones veintiún por ciento, treinta y un por ciento, cuarenta y un por ciento... son impropias, pese a que a veces pueda encontrárselas en los medios en español: «El veintiún por ciento de los alumnos son mayores de treinta años»; «Los partidarios de estas medidas han bajado en un año del treinta y tres al treinta y un por ciento de los residentes».

Uno solo se sustituye por la forma un cuando acompaña a un sustantivo masculino: no se  dice, por ejemplo, «uno caballo», sino «un caballo»; sin embargo, en los ejemplos citados, veintiún y treinta y un no están acompañando a un sustantivo, sino a la locución por ciento, que comienza con la preposición por y funciona como un adverbio.

No está justificado, pues, emplear un en esos casos; con la expresión por ciento, hay que utilizar uno, no un: «el veintiuno por ciento de los alumnos»; «el treinta y uno por ciento de los residentes».

Fuente: http://www.fundeu.es/recomendaciones-P-veintiuno-por-ciento-no-veintiun-por-ciento-1038.html

Concordancia: palabras que cuantifican

Hay palabras que se usan para para cuantificar cosas. Para indicar qué es lo que cuantifican, van acompañados de una preposición y de un sustantivo que suele ser plural:

mayoría de los estudiantes
cantidad de especies
multitud de personas.

Casi todos estos cuantificadores pueden concordar con el verbo tanto en singular como en plural, dependiendo de si se considera que el núcleo de la frase es el cuantificador singular o el sustantivo en plural al que este se refiere:

«La mayoría de los créditos se destina a financiar el consumo». (singular)
«La mayoría de partidos miran para el otro lado». (plural)

En general, la concordancia en plural es mayoritaria.

Casos especiales: 


1) Con los verbos ser, estar y parecer, usados con adjetivos o frases predicativas, la concordancia se realiza en plural:

«El resto de los barrios permanecían desiertos».
«Un diez por ciento de los encuestados eran extranjeros».


2) Cuando antes de estos sustantivos cuantificadores no hay un artículo o una palabra que los determine (infinidad, cantidad, multitud) la concordancia, obligatoriamente, ocurre en plural:

«Infinidad de personas marcharon esta tarde».
«Multitud de hinchas reciben al equipo».

Coma antes de sino

La palabra sino (diferente de si no, con sentido de condición) siempre va precedida de un concepto negativo:
«No llegó dormido, sino borracho».

A veces, antes de este término va una coma; otras no. Estos son los usos:

Con coma:
1. Cuando se confronta un concepto afirmativo a otro negativo anterior:
 «No quise decir eso, sino todo lo contrario».


2. Cuando suma elementos en una enumeración (una estructura típica que se usa es no solo/ sino también)
«No solo toca la guitarra, sino también el piano y el violín».

Sin coma:
1. Cuando significa excepto:
«No amo a nadie sino a Fernando».

2. Cuando significa solamente, tan solo, más que, otra cosa que:
«No pido sino que escuchen lo que tengo para decir».

¿De arriba a abajo/ de arriba abajo?

De arriba abajo, no de arriba a abajo

A menudo, se escucha oye y se lee la expresión de arriba a abajo: 
«Ella me miró de arriba a abajo».


En rigor, la forma correcta es de arriba abajo, lo mismo que de abajo arriba. Los manuales explican que ambas palabras son adverbios que pueden usarse después de preposiciones como de, desde, hacia, para o por, pero nunca luego de a, ya que esta preposición está incluida en la forma: arriba - abajo, por lo que su uso sería redundante (de hecho, cuando escuchamos a abajo, algo nos suena mal)

¿Suena bastante lógico, no?

Concordancia: un adjetivo antes de varios sustantivos

La concordancia es un acuerdo gramatical obligatorio que debe existir entre distintas partes o palabras en una frase. Se refleja en distintos aspectos gramaticales: género, número y persona. Por ejemplo, un sustantivo debe concordar en género y número con los adjetivos y artículos que lo modifican:  «Las casas blancas».

En distintas entregas, voy a reseñar algunos casos que pueden generar dudas para repasar algunas de las normas que la RAE señala en relación con este tema.

Un adjetivo antes de dos o más sustantivos

El Diccionario panhispánico de dudas advierte dos cuestiones:

1) Si se coordinan dos o más sustantivos en singular, el adjetivo irá en singular:

«La indispensable vigilancia y control nocturnos brillan por su ausencia».


y no: *«las/los indispensables vigilancia y control nocturnos»

2) Si los sustantivos coordinados son nombres propios de persona o cosa, o nombres apelativos de persona, el adjetivo antepuesto va en plural:

«Los simpáticos Paco y Toni».
«Sus futuras esposa y suegra».

¿Alínean o alinean?

Hubiera jurado que era alínean, pero no, che:

alinear(se).
En todas las formas en las que el acento recae en la raíz aline-, la vocal tónica es la -e-: alineo [alinéo], alineas [alinéas], alinea [alinéa], alinee [alinée], etc. Son, pues, incorrectas las formas en las que, por influjo del sustantivo línea, se desplaza el acento a la -i-: alíneo, alíneas, alínea, alínee, etc., así como su pronunciación con cierre de la /e/ átona resultante en /i/: [alínio], [alínias], [alínia], [alínie], etc., pronunciación que a veces llega a reflejarse en la escritura. Los mismos errores deben evitarse en el resto de los verbos acabados en -linear, como delinear, desalinear, entrelinear, interlinear y linear.

(Fuente: DPD)

¿Estadio o estadío?

Cuando hablamos de estadio como 'recinto donde se celebran competencias deportivas' no dudamos de que su pronunciación sea es-ta-dio. Sin embargo, la palabra también es sinónimo tiene el significado de 'etapa o fase de un proceso'. Es en esta acepción que existen dos pronunciaciones y por lo tanto, dos escrituras: es-ta-dio y es-ta--o.

Yo pronuncio como la segunda, pero parece que está mal.

estadio. 1. ‘Recinto en que se celebran competencias o competiciones deportivas’: «El estadio está a reventar» (Morena Silencios [Esp. 1995]). El uso del latinismo stádium es innecesario, y se debe más al influjo inglés que a razones cultistas: «Salimos para el stádium El Campín, a ver el segundo juego entre el Millonarios y el Real Madrid» (Che/Granado Viaje [Arg. 1992]). Es inadmisible la forma estádium, que no es ni latina ni española.
2. También significa ‘etapa o fase de un proceso’: «Su efecto letárgico y apaciguador iba cediendo paso a una fase de euforia activa, cuyo estadio siguiente era la sed» (Aguilar Golfo [Méx. 1986]). Es errónea la acentuación estadío, a pesar de ser frecuente en textos médicos.

(Fuente: DPD)

¿Alrededor de él o alrededor suyo?

Las gramáticas suelen mencionar que no se considera correcto el empleo de un adverbio delante de un posesivo (mío, tuyo, suyo, etc.).

En este sentido, se desaconseja el uso de expresiones como delante mío delante suyo y se sugiere para estos casos el uso de delante de mí, delante de él.


El otro día, mientras corregía un libro, me encontré con la frase alrededor suyo y esta me despertó la duda. A pesar de que según la normativa, por lo que explico antes, no era correcta, me parecía que no estaba mal su empleo. Busqué en el Diccionario panhispánico de dudas y encontré esto:

Alrededor. 1. Adverbio que significa ‘en torno a algo’ o ‘por el perímetro de algo’. Suele ir seguido de un complemento precedido de la preposición de:

Se sentaron alrededor del fuego;
Daban vueltas alrededor de la plaza.

Es legítimo el uso del adverbio seguido de los posesivos plenos mío, tuyo, suyo, etc.:

«Mira mi padre alrededor suyo»

Se justifica este uso porque el adverbio alrededor está formado por la contracción al seguida del sustantivo rededor (‘contorno’):

«Se trata de ir bordando todo el rededor»

Así que ya saben: las dos a la final.

Comillas en combinación con otros signos de puntuación

Esta es una duda que me vuelve todo el tiempo. ¿Qué pasa cuando un texto que está entre comillas incluye un enunciado que finaliza?

Esta es la regla:

El texto que va dentro de las comillas tiene una puntuación independiente y lleva sus propios signos ortográficos. Por eso, si el enunciado entre comillas es interrogativo o exclamativo, los signos de interrogación y exclamación se escriben dentro de las comillas:

«¿Dónde están los baños, por favor, le preguntó al conserje.

«¡Qué ganas tengo de que lleguen las vacaciones!», exclamó.

Cuidado:

De esta regla debe excluirse el punto, ya que cuando el texto entrecomillado abarque la parte final de un enunciado o de un texto, se escribirá punto detrás de las comillas de cierre.


«No está el horno para bollos». Con estas palabras zanjó la discusión y se marchó.

Incluso si delante de las comillas va un signo de cierre de interrogación o de exclamación, o puntos suspensivos, deberá colocarse punto detrás de las comillas de cierre cuando lo que va entrecomillado constituye el final de un enunciado o de un texto:

«¿Dónde te crees que vas. Esa pregunta lo detuvo en seco.

«Si pudiera decirle lo que pienso realmente...». A Pedro no le resultaba fácil hablar con sinceridad.

¿Comillas o cursiva?

Las comillas altas (“ ”) o las bajas (« ») se usan tanto para citar textualmente como para destacar expresiones que tienen algún tipo de particularidad. Lo que genera confusión es que la principal función de la letra cursiva es el realce (por ejemplo, una palabra, oración o texto que se usa en un sentido especial o que se quiere destacar porque no pertenece a nuestra lengua). En este sentido, muchas veces los que escriben presentan dudas entre estas dos opciones.

Aquí van dos usos que suelen generar problemas:

1) Extranjerismos:
El Diccionario panhispánico de dudas advierte que en textos impresos en letra redonda es recomendable reproducir los extranjerismos crudos (aquellos que no están incorporados en nuestra lengua) en letra cursiva en vez de escribirlos entrecomillados. Si el texto está en cursiva, entonces sí es frecuente el uso de las comillas:

«En el salón han puesto una boisserie que les ha costado un dineral».
o
«En el salón han puesto una "boisserie" que les ha costado un dineral».

2) Énfasis para resaltar importancia
En determinados contextos en los que se busca enfatizar algo, pero solo para resaltar la importancia de una o varias palabras, no se aconseja el uso de comillas ya que uno de sus usos habituales es el de la ironía y esto podría confundir al lector. Tampoco la cursiva, ya que el realce que sugiere esta tipografía no se vincula con este uso.

Énfasis:
«Es muy importante que traigan todos los documentos».

Ironía:
«Parece que últimamente le va muy bien en sus «negocios».

¿El primer acta o la primera acta?

La semana pasada recibí una consulta de un lector de Venezuela que quisiera compartir porque presenta una duda que me pareció muy interesante.

Lo que planteaba era lo siguiente:

Sabemos que en español existe una regla que indica que cuando un sustantivo femenino comienza con a tónica (es decir que se acentúa en su pronunciación, independientemente de si lleva o no tilde), debemos cambiar el artículo femenino la por el para evitar la repetición de sonidos a:

«El agua» y no «la agua». «El águila» y no «la águila».

A pesar de este cambio en el artículo, los sustantivos siguen manteniendo su género. Es por eso que cuando tenemos que calificar la frase usamos un adjetivo femenino:

«El agua cristalina» y no «el agua cristalino».
«El águila guerrer y no «el águila guerrero».

Hasta aquí a nadie se le presenta un problema, dado que más de una vez hemos escuchado o leído construcciones de este tipo. La cuestión surge cuando tenemos que colocar un adjetivo antes del sustantivo. Lo que esta persona me preguntaba era si debíamos, en ese caso, mantener la misma lógica.

¿Deberíamos decir «el primer acta», en lugar de «la primera acta»? Y si fuera «el primer acta», ¿diríamos «el primer acta registrada»?

Mi respuesta fue la siguiente:

La regla de sustitución del artículo queda sin efecto si entre el artículo y el sustantivo se intercala un adjetivo.
No se debe decir *«un enorme águila», sino «una enorme águila».

En este caso, primer es un adjetivo, así que deberíamos aplicar la misma regla:
«La primera acta registrada».