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¡Que vuelva! Frase del día: «Está en la pomada» / «Está en la trenza»

En la página http://www.clubdetango.com.ar/ encontré este artículo:

«Estar en la pomada tiene su expresión sinónima que sería "estar en la cosa", lo que significa estar en conocimiento detallado de algo, bien informado, generalmente de algo reservado.
El que está en la pomada es "el que se las sabe todas", muy de porteño fanfarrón. Generalmente el que está en la pomada lo refiere a un hecho político. El que está en la pomada puede mover resortes que el perejil no mueve, tiene poderes que el común de la gilada no conoce y que él domina porque a veces "está en la trenza"».

Cuando era chica, solía escuchar con mucha frecuencia que alguien estaba en la pomada, por lo que ya la siento demasiado gastada. Así que me quedo con la última variante que señala la gente de Club del Tango y sugiero un nuevo «¡Que vuelva...!»: estar en la trenza.

¡Que vuelva! Caso del día: ¿no te giba?

No puede volver algo que nunca estuvo, así que en rigor, este sería un «¡Que se imponga!»

Leyendo un artículo de la página del Cervantes, me encontré con esta simpática expresión: «¿No te giba?»

La autora explica que dado que giba es joroba, el verbo gibar significa 'jorobar, fastidiar' (este tipo de cosas hacen que me encanten los fenómenos de la lengua: nunca me había detenido a pensar en la joroba como la mochila, algo que pesa y molesta, y en la extensión de este sentido, la acción jorobar). También se menciona en la nota otra expresión bastante gráfica: «¿No te jeringa?». (El verbo jeringar me mató, no sé si no es mejor que gibar)

Así que si están aburridos del «¿No te jode?», pueden probar con alguna variación: «¿No te giba?» «¿No te jeringa?».

¡Que vuelva bolunfil!

Me gustan los insultos light que suenan como si fueran proferidos por un quedado en el tiempo. Podría decir que me los imagino saliendo de la boca de un Calabró (Juan Carlos), por ejemplo. No me molesta en absoluto parecer una goma cuando los uso.

Recuerdo que mi tío Ricardo tenía un gran repertorio de expresiones de autor (no sé si delante de adultos mandaba a la gente a la reverenda mierda, pero al menos cuando estaba con nosotros, que éramos niños, nos mandaba a otros lugares más poéticos). Hoy, en la sección «¡que vuelva!», propongo bolunfil para reemplazar al ya desgastado y carente de toda significación boludo.

Vale decir: «Sos un reverendo bolunfil».

¡Que vuelva! Frase del día: «¡Chiva calenchu!»

Reconozcamos que jodete no es una palabra que canse: con frecuencia resulta muy práctica y casi nadie tiene registro de la gran cantidad de situaciones en que es empleada; podríamos definirla como una puteada neutra. Tal vez sea esta neutralidad la que la vuelve poco efectiva en aquellas ocasiones en que necesitamos ser más directos o personales con nuestras dedicatorias. También hay que admitir que es difícil no caer en la franca y asequible grosería. Para estos casos, propongo un nuevo «¡que vuelva!»:  el viejo y querido «chiva calenchu».

Modo de empleo: la frase pierde vigor si no se pronuncia con el debido gesto, que consiste en ubicar la mano sobre el mentón (un poco al estilo fierita, pero sin sobreactuación), y deslizar nuestros dedos índice y pulgar desde arriba hacia abajo.

¡Que vuelva! Frase del día: «¡Ese está en falsa escuadra!»

Como todos los viernes, propongo un nuevo «¡Que vuelva!»

Debo confesar que no estoy segura de si el uso de esta frase fue tan extensivo, pero de todos modos, no es algo que importe tanto. Aparece en un tango (Fangal), y su poder redunda en que por más que uno nunca la haya escuchado antes, en contexto, suele resultar muy ilustrativa:

«Ese está en falsa escuadra».
«Ese anda en falsa escuadra».

Aplíquese a dos usos:
a) «estar borracho/en dope»
b) «estar loco/ de la gorra»

¡Que vuelva...! Frase del día: «Te voy a poner una zapatería en el centro»

Queda inaugurada la sección «¡Que vuelva!» (tenemos unos cuantos términos caídos en desuso que queremos desempolvar).

La primera iniciativa será declarar de interés general a la frase «Te voy a poner una zapatería en el centro» para reemplazar al un tanto subido de tono «Te voy a romper el culo a patadas».

Solo en contextos de máxima familiaridad vale mezclar y decir: «Te voy a poner una zapatería en el culo». De todos modos, este blog aconseja el primer uso. :)