¿Días sábado o días sábados?

¿Cuál es la forma aceptada por la normativa? ¿Los días sábado o los días sábados? ¿Días domingo o días domingos?

Ante los otros nombres de días no se presenta la duda, ya que llevan la letra s tanto en singular como el plural:
«El médico solo atiende los días martes».

¿Qué se hace con los sustantivos sábado y domingo? Bueno, el Diccionario panhispánico de dudas aclara que se considera que la palabra sábado va en aposición especificativa al término día, por lo cual no necesita variar con el plural:
«El lugar abre los días sábado».

De todos modos, en el lenguaje coloquial está bastante difundida la otra forma (días sábados).

La misma regla se aplica a otros casos en los que un sustantivo modifica a otro de manera directa como una aposición: coches cama, hombres rana, fechas límite, etc.

¿«Dio» con tilde?

La palabra «dio» va sin tilde. ¿Por qué mucha gente se confunde?
Quizá porque todas las palabras agudas que terminan en -ió (es decir, muchísimos verbos) sí la llevan.
Bueno, resulta que «dio» tiene una sola sílaba, y por eso no se tilda.
Así que recuerden: 
«movió» lleva tilde, pero «vio» no.
«perdió» lleva tilde, pero «dio» no.
Lo mismo aplica para «fue» y «fui».

¿Dar abasto o dar a basto?

Hace unos días alguien me preguntó cómo se escribía la palabra abasto. En el momento, no entendía cuál podía ser la duda. Me resultaba obvia su escritura. Por supuesto que sé que la b y la v se prestan a confusiones, pero teniendo en nuestra ciudad un barrio llamado así y también un centro comercial importante, se me había naturalizado la palabra. Sin embargo, cuando me explicaron el por qué de la inquietud, yo entré también en una especie de nebulosa. Volvieron a preguntarme: ¿se dice dar abasto, dar a basto o dar a vasto? En verdad, lo que provocaba la cuestión era el uso del término en la expresión con el verbo dar.

La vacilación se abre, además, porque que existe la palabra vasto.

vasto, ta. (Del lat. vastus).
1. adj. Dilatado, muy extendido o muy grande.

Y también existe basto, con dos orígenes diferentes: uno que proviene del latín vulgar bastum (palo) y otro que se deriva del verbo bastar, y que significa ‘grosero, tosco’ o que también supone aquello ‘que está abastecido’.

Sin embargo, dar abasto no se construye con ninguna de las dos formas anteriores, ya que la locución se compone de dos partes: por un lado, el verbo dar y por el otro, el sustantivo abasto, que significa ‘provisión de cosas necesarias, especialmente de víveres’.

En resumen, la expresión se escribe dar abasto y quiere decir ‘bastar o rendir lo suficiente’ y, en general, se utiliza en oraciones negativas:
«No doy abasto con las tareas de la oficina».

Cómo o como

Cuando la palabra cómo tiene caracter interrogativo o exclamativo debe tildarse.

Por lo general, cuando se encuentra en una interrogación o exclamación directas no supone dudas:

¿Cómo se llama? ¡Cómo han crecido las plantas!

En cambio, en las indirectas, cuesta más advertir que se trata de preguntas o exclamaciones encubiertas:

No sabía cómo te llamabas. Es increíble cómo han crecido las plantas. No entendía cómo había hecho ese desastre.

Para no confundir cómo con como, es útil recordar que se escribe con tilde cuando significa ‘de qué manera’ o ‘de qué modo’, o cuando se puede sustituir por la locución ‘por qué’. En cambio, si puede reemplazarse por la palabra que, no lleva tilde.

En algunos casos, a veces se presenta cierta ambigüedad, por lo que la tilde es importante para comprender el sentido que se le quiere dar al texto.

«Ya vas a ver como llega». (Ya vas a ver que llega).
«Ya vas a ver cómo llega». (Ya vas a ver de qué modo llega).

«No hay como dormir una buena siesta». (No hay nada mejor que dormir una buena siesta).
«No hay cómo dormir una buena siesta». (No hay manera de dormir una buena siesta).

¿Sino o si no?

En el ranking de errores comunes, la confusión entre sino y si no ocupa uno de los primeros puestos.

Al buscar en cualquier manual, se encuentra la clásica explicación de que sino es una conjunción adversativa y si no es la combinación de una partícula condicional y la negación. Sin embargo, a veces las aclaraciones técnicas involucran conceptos que la gente no maneja y no se produce una verdadera internalización del tema.

Por eso, en principio voy a dar un truco muy pragmático para aquellos que se guían por el oído:

sino rima con vino y si no, con asesinó (sí, así de tonto y simple).

Créanme que a algunos les funcionan muy bien este tipo de consejos ayuda memoria.


Por otra parte, para recordar los contextos de uso y ser más específicos, aquí les dejo un resumen:

1) Sino se usa después de un no y puede servir para
  • confrontar un concepto afirmativo con otro negativo anterior (No fue Juan, sino su mujer).
  • sumar elementos (No solo estudia sino que además trabaja).
  • significar excepto (No quiere a nadie sino a su perro).
  • significar tan solo (No quiero otra cosa sino que me amen).

Es decir que la estructura de la frase es siempre NO A SINO B

2) Si no sirve para introducir una condición negativa para que otra cosa se cumpla:

«Si no llueve, jugamos al fútbol».

Se puede sacar el no y enviarlo a la otra parte de la oración: «Si llueve, no jugamos al fútbol».

Además, en estos casos siempre es posible intercalar una palabra: «Si hoy no llueve», «Si Pedro no llega», etc.

¿Había o habían?

Mucha gente me pregunta por el verbo había y por qué no es correcta la forma habían cuando lo referido es un susantivo plural.

Es simple: cuando significa existir u ocurrir, haber es un verbo impersonal. Esto significa que no tiene un sujeto, no necesita ir en plural para concordar. Es como llueve, nieva y todos esos que nombran fenómenos climatológicos y que no tienen variación en plural. Entonces, si decimos «había una silla», también debemos decir «había veinte sillas». Ese sustantivo con el que se relaciona la acción haber (una silla, veinte sillas, etc) no es su sujeto, por eso no es necesario el plural. (¿Vieron que para algo servía estudiar sintaxis en la escuela?)

La confusión se produce porque había o habían pueden actuar como auxiliares de otros verbos para formar los llamados tiempos compuestos: habían terminado, había comido, etc. En estos casos, la acción principal es terminar o comer (que se expresan con el participio terminado o comido) y haber es auxiliar justamente porque ayuda a formar el tiempo verbal, pero no tiene un significado independiente.

La regla es válida para los demás tiempos de haber: hay, había, hubo, habrá, habría. Un truco que funciona bien es intentar convertir la oración usando la forma hay, que es el presente del verbo. Así como se puede decir «hay una silla», ¿se podría decir «hayn veinte sillas»? Si la n no va en hayn, tampoco va en habían.

Casos especiales de concordancia III: ¿una de las alumnas o una de los alumnos?

Un caso que suele presentar dudas en cuanto a la concordancia es el de las llamadas construcciones partitivas. Se trata de frases en las que un primer elemento cuantificador (uno -na, muchos -chas, varios -rias, mitad, etc.) identifica una parte dentro de un todo. Ambos elementos (parte y todo) se unen a través de la preposición de: muchos de los estudiantes, otra de las participantes, etc.

La regla dice que si ambos elementos presentan género, debe haber concordancia forzosa entre ellos:

«una de las empleadas» / «uno de los empleados».

El conflicto surge cuando la frase designa a un grupo particular, en el que hay elementos de ambos géneros. Supongamos que el colectivo está conformado por una empleada mujer y seis empleados varones. ¿Debe decirse "una de las empleadas"? Según la regla, sí.

¿Tuviera o tuviese?

Cuando daba clases de español para extranjeros siempre me preguntaban si estas dos formas del pretérito imperfecto del subjuntivo eran intercambiables. La respuesta es sí, pero existen excepciones (¡la nuestra es una lengua llena de casos especiales!).
Cuando se busca indicar que una acción es anterior, simultánea o posterior a otra que sucede en el pasado, el uso es indistinto:

«Tal vez tuviera/tuviese trabajo atrasado». «Le pedí que me tuviera/tuviese en cuenta». «Le deseó que tuviera/tuviese un buen viaje».

Lo mismo ocurre en oraciones que expresan condiciones: 

«Si tuviera/tuviese más tiempo, haría más ejercicio».

Sin embargo, existen otros usos bastante específicos en que esta alternancia no es viable. Por ejemplo, cuando este tiempo verbal se usa para expresar cortesía con el verbo querer o para aconsejar con deber

«Quisiera un kilo de manzanas, por favor». Reemplazable por querría, pero no por *quisiese
«Debieras dormir más». Reemplazable por deberías, pero no por *debieses

Podría reseñar otros casos en los que no hay doble opción, pero estos son los más habituales.